¿Cuál fue el reto o problema a resolver?
El desarrollo de productos seguros para el consumidor es un pilar fundamental en la industria química. En este contexto, nos enfrentamos a un desafío al creer que ciertas pinturas y barnices podían ser la fuente de origen de determinados compuestos nocivos identificados durante el proceso de producción por nuestro cliente. De confirmarse esta hipótesis, el cliente tenía la necesidad urgente de modificar la formulación del producto para garantizar la seguridad del producto de acuerdo a la normativa VLA- ED.
El objetivo del proyecto llevado a cabo por el equipo de Materiales, fue la de identificar de manera precisa cuál de los componentes de la formulación de pintura contribuía en mayor medida a la presencia de las emisiones. El éxito del proyecto se mediría por la capacidad de nuestro equipo para detectar las sustancias de interés, de tal forma que le permitiría al cliente mejorar la formulación.
La metodología adoptada para enfrentar este desafío comenzó con la recepción y adecuada manipulación de las muestras de pintura. El equipo de Ingeniería Forense llevó a cabo una serie de análisis y técnicas especializadas para preparar las muestras, garantizando que estas pudieran analizarse eficazmente para la detección de compuestos orgánicos volátiles (COVs).
Una vez preparadas, cada muestra se introdujo en una micro-cámara diseñada para extraer y concentrar estos compuestos. El siguiente paso consistió en capturar los COVs extraídos en un tubo absorbente, específicamente de tenax, que es ampliamente reconocido por su eficacia en la retención de estas sustancias que se deseaban analizar. La fase crítica del proyecto involucró el análisis cualitativo de los compuestos capturados utilizando cromatografía de gases, una técnica que permite una identificación detallada de los componentes.
Finalmente, la interpretación de los datos obtenidos fue crucial. Este análisis permitió no solo identificar el componente problemático sino también cuantificar la concentración de los compuestos. Como resultado, se pudo recomendar al cliente una alternativa más segura para ese componente específico, disminuyendo significativamente las emisiones y por tanto los riesgos para el consumidor.