¿Cuál fue el reto o problema a resolver?
La utilización de ozono como higienizante se ha posicionado como una de las opciones más competitivas por su alta eficacia, la ausencia de consumibles y facilidad de uso.
No obstante, dada la toxicidad del ozono, se quiso desarrollar un sistema que permitiera la eliminación del ozono residuales, logrando un sistema higienizante eficaz, y a la vez seguro.
¿Cómo se abordó o cuál fue la solución?
El equipo de Innovación en Materiales realizó una prospección teórica de la viabilidad de todas las tecnologías existentes para eliminar ozono. A partir de ello, se seleccionó las tres mas adecuadas para ensayarlas experimentalmente.
Con la ayuda de un montaje de laboratorio diseñado a medida, se pudieron evaluar la efectividad de diferentes filtros catalíticos preparados previamente en el laboratorio. A partir de estos estudios, se conoció su efectividad para degradar ozono, así como otros parámetros de interés (durabilidad, resistencia, cinéticas….).
Una vez finalizado el estudio, se consiguió proveer un filtro que cumpliera con los requerimientos definidos por el cliente, y capaz de ser fabricado a escala industrial.
El reto
- Eliminar ozono residual para disponer de un sistema eficaz y seguro para los usuarios
- La solución seleccionada, debía de cubrir los requerimientos del cliente y ser una solución industrializable
La solución
- Se realizó una prospección del estado del arte, seleccionando las potenciales tecnologías para degradar ozono
- Se prepararon filtros catalíticos de elevada efectividad y fácil industrialización